¿Piensas tener una serpiente de mascota? Conoce sus riesgos y si es caro o barato

Tener una serpiente en casa puede ser fascinante, pero no es una decisión menor. Estos animales requieren conocimientos específicos, instalaciones controladas y, en muchos países como México, permisos y documentación legal. Antes de comprar una, conviene conocer los riesgos, las necesidades básicas y el verdadero coste, tanto económico como de tiempo, que implica su tenencia.

¿Es peligroso tener una serpiente como mascota?

El riesgo depende mucho de la especie. Las serpientes no venenosas y de tamaño moderado presentan “riesgos mínimos”, según veterinarios especializados en exóticos, siempre que su cuidado sea correcto. Sin embargo, todas las serpientes pueden morder y una mordedura duele y puede infectarse si no se atiende adecuadamente; por eso la manipulación requiere experiencia y respeto por el animal.

Además, un peligro práctico es la fuga: un terrario mal cerrado facilita escapes que pueden ser peligrosos para el animal y causar alarma en el vecindario.  En el plano emocional, los expertos señalan que las serpientes no desarrollan el mismo tipo de vínculo afectivo que perros o gatos, el cuidador puede apegarse, pero no esperar reciprocidad afectiva, algo a considerar si buscas compañía interactiva.

¿Qué especies son recomendables y cuáles están prohibidas o reguladas?

Para principiantes suelen recomendarse especies dóciles y de manejo sencillo: pitón bola, serpiente del maíz, serpiente rey y serpiente de leche son ejemplos frecuentes en el mercado de mascotas. En cambio, especies venenosas o de gran tamaño (como algunas boas enormes) no son aptas para propietarios sin experiencia ni para casas con niños pequeños.

Además, en México y muchos países la tenencia puede exigir permisos o estar regulada por convenios internacionales. La SEMARNAT dispone del trámite para autorizar ejemplares exóticos como animales de compañía; cualquier persona que pretenda tener fauna silvestre exótica debe cumplir con ese procedimiento y aportar la documentación que acredite la procedencia legal del ejemplar. 

Si la especie está incluida en alguno de los apéndices de la CITES, su comercio y traslado internacional requieren permisos CITES específicos; por tanto, antes de comprar conviene comprobar el estatus CITES de la especie.

Las sanciones por poseer ejemplares protegidos o traficar con fauna sin permisos pueden ser severas, incluyendo multas y penas de prisión en casos de comercio ilegal. Por eso la documentación (factura, certificado CITES cuando aplique, y el permiso SEMARNAT) no es opcional: es la garantía legal tras la compra. 

¿Cuánto cuesta mantener una serpiente: es caro o barato?

No es una mascota “barata” si se buscan condiciones responsables. Hay que considerar:

• Coste inicial: terrario adecuado (tamaño y seguridad), iluminación y fuentes de calor (lamparas y termostato), sistemas de humedad, sustrato, escondites y posibles plantas artificiales o muebles.
• Gastos de alimentación: muchas serpientes se alimentan de presas (ratones, ratas) que deben adquirirse sanas y en la frecuencia correcta.

• Atención veterinaria: revisiones con veterinario especialista en exóticos, desparasitaciones y atención en caso de enfermedad.
• Permisos y documentación: si aplica, gastos administrativos para permisos SEMARNAT y, si procede, permisos CITES. 

¿Cómo comprar y cuidar responsablemente una serpiente?

• Compra en comercios especializados o criadores reconocidos; exige factura y documentación de procedencia. El vendedor debe conocer la especie y aconsejar sobre su cuidado. 
• Prepara el terrario antes de traer al animal: tamaño, temperatura, humedad y seguridad deben ajustarse a la especie concreta. No son animales de exterior. 
• Infórmate sobre permisos locales y, si la especie está regulada, tramita la autorización correspondiente ante SEMARNAT y certificaciones CITES cuando sean necesarias.
• Considera la longevidad: muchas especies pueden vivir décadas; no es una tenencia temporal.

Tener una serpiente puede ser gratificante para quien esté informado, tenga tiempo, presupuesto y un entorno seguro. Si piensas dar el paso, prioriza siempre el bienestar del animal y el cumplimiento legal: asistir a una clínica veterinaria de exóticos para una revisión inicial y confirmar los permisos necesarios es un buen primer paso. Para cualquier duda específica sobre permisos SEMARNAT o certificados CITES, consulta las páginas oficiales y trámites antes de adquirir el ejemplar.