El fallecimiento de Ozzy Osbourne a los 76 años marca el fin de una era en la historia del rock. Su figura no solo definió el sonido del heavy metal junto a Black Sabbath, sino que también dejó huella por su lucha abierta contra la enfermedad que lo acompañó hasta sus últimos días: el Parkinson.
Rodeado por su familia en su casa en Inglaterra, el legendario músico murió el 22 de julio de 2025, después de años en los que su salud se deterioró progresivamente. Su caso generó interés no solo entre los fanáticos del rock, sino también en la comunidad médica por la visibilidad que dio a una enfermedad crónica que afecta a millones de personas en el mundo.
¿Cómo vivió Ozzy Osbourne sus últimos años?
En la última etapa de su vida, Ozzy Osbourne enfrentó un declive físico importante, producto del Parkinson tipo 2, que le diagnosticaron formalmente en 2019. Desde entonces, sus apariciones públicas se volvieron esporádicas y muchas veces dependió de asistencia para caminar o moverse. El cantante describió su situación con sinceridad: tenía días buenos y otros en los que apenas podía levantarse de la cama.
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Las complicaciones no terminaron ahí. A los efectos del Parkinson se sumaron lesiones vertebrales crónicas, resultado de una caída en su casa y del accidente que sufrió en 2003. Las cirugías para corregir esos daños, especialmente en la columna, también influyeron en su movilidad y calidad de vida.
¿Cuándo reveló Ozzy Osbourne que padecía Parkinson?
La noticia de su diagnóstico se hizo pública en enero de 2020, cuando Ozzy Osbourne y su esposa Sharon concedieron una entrevista en televisión. Allí explicaron que la enfermedad había estado presente durante un tiempo y que finalmente decidieron hablar abiertamente sobre el tema. El músico dejó claro que no veía la enfermedad como una condena, aunque reconoció lo difícil que era convivir con ella.
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A partir de ese momento, el líder de Black Sabbath se convirtió en un símbolo de lucha para muchas personas que también enfrentan este padecimiento. Su honestidad permitió visibilizar los síntomas y las consecuencias de una enfermedad neurodegenerativa poco comprendida fuera del ámbito médico.
¿Qué tipo de Parkinson tenía Ozzy Osbourne?
El artista sufría una variante progresiva conocida como tipo 2, que afecta tanto el movimiento como las funciones autonómicas del cuerpo. Esto provocó en él rigidez, dolor crónico, temblores y dificultades respiratorias, lo cual complicó aún más su estado general. Aunque el tratamiento farmacológico y la rehabilitación ofrecieron algo de alivio, su condición empeoró con el paso de los años.
Las intervenciones quirúrgicas para estabilizar su columna, junto con el uso de medicamentos para el dolor neuropático, formaron parte de su rutina médica. Sin embargo, la carga física y emocional resultó difícil de sobrellevar, incluso para alguien con su resistencia y trayectoria.
Pese a su fragilidad física, Ozzy Osbourne mantuvo el vínculo con sus seguidores. Su última aparición pública ocurrió durante un concierto en Birmingham, su ciudad natal, donde se presentó sentado en un trono mientras interpretaba “Paranoid”, una de las canciones más icónicas de Black Sabbath. Ese momento, lleno de simbolismo, se volvió inolvidable tras su muerte pocos días después.